La prevención
de fracturas y torceduras va encaminada a unos cambios básicos de los hábitos
de vida diarios que permitan fortalecer músculos y huesos pero además también
que permitan evitar situaciones de alto riesgo.
- Realizar
actividad física regularmente para fortalecimiento de músculos y huesos.
- No fumar.
- No beber alcohol en exceso.
- Consumir alimentos ricos en calcio y vitamina D.
- Usar baston si es necesario.
- No usar zapatos con suela muy lisa.
- Revisar la vista una vez al año.
- Usar la ducha en lugar de la bañera.
- Usar antideslizantes y barras para sujetarse en el lugar en el que toma el baño.
- Mantener las alfombras sujetas adecuadamente en el suelo.
- Usar las escaleras siempre con el pasamanos y la luz encendida.
- Evitar caminar con medias.
- Iluminar bien todos los ambientes para evitar tropiezos.
- Limpiar de inmediato los líquidos derramados para evitar resbalones.
- Realizar un buen calentamiento siempre antes de la actividad física.
- Usar zapatos ajustados.
- Evitar usar tacones.